Aparte de esta peculiaridad, la imagen presenta unas articulaciones en los hombros para poder realizarse el "Davallament de la Creu" que consiste en el descendimiento o desenclavo de una imagen de Cristo la tarde del Viernes Santo. Con esta imagen se ha recuperado una celebración perdida hace doscientos años. La iniciativa de esta recuperación ha corrido a cargo de tres hermandades vinculadas a la iglesia de Santa María de Mahón: El Santo Sepulcro, la Soledad y los Centuriones de San Cornelio.